Italia es un país que cuenta con nada más y nada menos que con 42 sitios declarados como Patrimonio de la Humanidad. Es así, que por el año 1994 y 1996, la UNESCO se encargó de nombrar en la ciudad de Véneto, a las Villas de Palladio o Villas Palladianas como Patrimonio, reconocido a nivel mundial.
Vale señalar que las mismas corresponden a un grupo de villas, construidas por el arquitecto Andrea Palladio hacia la mitad del siglo XVI, con el objetivo de crear hogares para las familias más distinguidas de la zona (como lo eran los aristócratas y la alta burguesía) y además, utilizarlas como centros de producción, por lo que están repletas de campos y viñedos.
Interiorizando más sobre la historia de las Villas de Palladio, es importante mencionar que su diseñador prestaba atención hasta el más mínimo detalle en sus construcciones. Tal es así que durante el siglo XVI las fachadas de las casas estaban adornadas con símbolos de propietario, para dar la impresión de poder, y no poseían grandes alturas (como si lo eran los palacios de la ciudad).
En tanto a los interiores, Andrea Palladio repartía las cocinas, lavandería y bodegas en el sector de planta baja, a causa de su funcionalidad (ya sea vertical u horizontalmente).
Claramente, Palladio se inspiró en los inmensos complejos, que tenían aspecto similar a las casas de campo serpenteadas por dependencias. Para que os comprendáis mejor, la simetría era lo que él buscaba en cada construcción y sobre todo, que las barchesse (las cuales se encargaban de contener los centros de trabajo por medio de la división del espacio para no molestar a los propietarios de los hogares), debían localizarse con dirección Sur, de forma que se pudiera mantener seca la paja, evitando fermentarse y por ende, pudrirse. Un ejemplo es su gran obra publicada en 1570, en Venecia, denominada Quattro libri dell’architettura.
Y finalmente, hacia comienzos del siglo XV, las casas que se construían, solían realizarse con un patio en el sector de adelante, junto con un pozo y un muro que las bordeaba, el cual reagrupaba huertos de verduras, jardines y estanques para peces.
Foto: Villa Colloredo