El Anfiteatro Romano de Catania
Si tuviéramos que destacar un Anfiteatro Romano que sobresaliese por encontrarse en un sitio peculiar, sin duda alguna destacaríamos en anfiteatro de la ciudad de Catania en Italia ya que, se encuentra en todo el centro de la ciudad.
Este anfiteatro se encuentra situado en plena plaza de Stesicoro (la Piazza Stesicoro en italiano). Fue construido en el siglo II a.C. y aunque su aspecto exterior permanece resguardado y protegido para conservar su estado y antigüedad, este anfiteatro posee una gran importancia por ser uno de los más inmensos que existieron en la antigüedad.
Pero, en su historia, toda la ciudad de Catania ha sido ocupada por los vándalos y totalmente saqueada por lo que, el anfiteatro fue abandonado. Con toda esta situación, los habitantes de esta ciudad utilizaron toda la estructura para construir sus viviendas ocultando con ello los restos del anfiteatro, hasta su redescubrimiento en años posteriores.
Este gran anfiteatro tenía una capacidad para más de 16000 personas sentados y el doble que permanecían de pié, tan solo superado en su época por el famoso Coliseo de Roma, lo que le convirtió en el segundo anfiteatro más grande del mundo. Su estructura se componía de una cavea de 14 peldaños, que se encontraban divididas en tres alturas, incluyendo un podio y un corredor cubierto. Todo ello fue construido en piedra lávica combinada con cemento.
En la actualidad, podréis ver los restos que se encuentran a un nivel inferior que el suelo de la ciudad, donde se encuentran algunos de sus semicírculos y el resto de la antigua construcción, sigue oculta debajo de los edificios de los alrededores.
Este bonito anfiteatro ha permanecido oculto muchos años ya que, hasta el año 1904 no se reconstruyó, cosa que fue posible gracias al alcalde de ese momento, llamado De Felice, que decidió encargar al arquitecto Filadelfa Fichera iniciar las primeras tareas de excavación y restauración de lo que podéis ver en la actualidad.
Una visita única, que mezcla lo antiguo y lo moderno de una forma muy curiosa y llena de encanto y con un ambiente muy animado por los alrededores. 100 % recomendable.
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